Estos recipientes se denominan cápsulas (o placas) de Petri y se usan para cultivar microbios u otras células; se suele hablar de ‘cápsula’ para referirse exclusivamente al recipiente y de ‘placa’ cuando contiene un medio de cultivo en el que se hacen crecer los microorganismos. Su introducción en el trabajo experimental de microbiología a finales del siglo XIX fue un gran avance para esa ciencia y aun no se ha encontrado un sistema mejor para cultivar la mayoría de los microorganismos conocidos. La placa de Petri debe su nombre a Richard Julius Petri (1852-1921), que fue encargado del Museo de Higiene de Berlín y trabajó en el instituo que, en aquella ciudad, dirigía Robert Koch, uno de los pioneros de la microbiología y descubridor de la bacteria que causa la tuberculosis. Petri nació el 31 de mayo de 1852 y Google le dedica este doodle en el aniversario de su nacimiento. Sin embargo, para hacer justicia, Google tendría que haber dedicado el doodle también a otros dos investigadores que usaron esos recipientes antes de que lo hiciera Petri.
En 1886, el año anterior a la publicación del mencionado artículo de Petri, el británico Percy F. Frankland (1858-1946), profesor de química en la Real Escuela de Minas de Londres, ya había publicado un artículo en el que describía un recipiente de vidrio para el cultivo de bacterias del ambiente que tenía unas características muy parecidas a la cápsulas de Petri, pero no era tan bajo. Era un artículo sobre los experimentos que realizó para estudiar los microorganismos presentes en el ambiente en varias ciudades inglesas. De todos modos, las placas de Frnakland quizás tampoco fueron las primeras. En la tercera edición del libro Microorganismos y enfermedad, publicado en 1886, Emanuel Klein (1844-1925), bacteriólogo esloveno que trabajaba en Inglaterra desde 1872, muestra un dibujo esquemático del mismo recipiente y describe cómo usarlo para que se desarrollen en él microorganismos. El prefacio del libro está datado en 1885; por lo tanto, es posible que aquel año ya estuviese usando esos recipientes de cristal con tapa ajustable.
¿Es una casualidad que Petri, Frankland y Klein diseñasen recipientes tan parecidos? Dado que, después de 130 años aun no se ha encontrado un método mejor, ¿es posible que los tres llegasen por vías distintas a una conclusión que era la más práctica? ¿O alguien copio de alguien? Eso quizás nunca se sepa.
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